Los retrasos, las interrupciones del servicio, trenes anticuados y abarrotados… han sido desde hace años el pan nuestro de cada día de aquellos/as tarraconenses que viajan a Barcelona. Pero la situación ha empeorado hasta lo insoportable en los últimos meses, ya antes de la interrupción del servicio por las obras del túnel de Roda de Berà.
Parecía que los ciudadanos estaban resignados, que tragaban y tragaban con llegar tarde día tras día e incluso con perder oportunidades laborales. Pues no. Un grupo de viajeros dijo basta y se unió en la plataforma Dignitat a les Vies, con un doble objetivo: exigir el servicio que cualquier persona se merece y hacerse visibles.
Es la fuerza del ciudadano. Como apunta la portavoz de la plataforma, Ana Gómez: “El papel de la sociedad civil no debe subestimarse. Cuando las instituciones no responden a las demandas de la gente, es la acción colectiva la que puede abrir puertas, visibilizar problemas y generar cambios reales”.