Raquel López es la primera mujer al frente de la Policía Local de Cambrils y también la única inspectora jefa de todo el territorio. Rompe así, en el campo de las fuerzas de seguridad, el llamado techo de cristal.

Cuenta con una larga trayectoria de 22 años de servicios en diferentes cuerpos policiales del territorio. Durante estos últimos años ha desarrollado sus funciones en Salou, Valls, Mont-roig y Montblanc, municipio en el que ha sido la jefa de policía los últimos cuatro años y medio.

Diplomada en Pedagogía y graduada en Derecho, especializada en Derecho Público es, también, profesora del Instituto de Seguridad Pública de la Generalitat de Catalunya, donde imparte conocimientos de liderazgo y de técnicas policiales.

López relevó al subinspector Josep Muñoz, que se había jubilado en el verano de 2022 después de cuarenta años de servicio en el cuerpo. A lo largo de estos meses, le había sustituido de forma interina su hermano, Manel Muñoz.

La inspectora se enorgullece de que “el techo de cristal se está superando en todas las policías. Está habiendo un cambio y cada vez hay más mujeres liderando y comandando Policías Locales. Las políticas de igualdad dependen de cada Ayuntamiento, por lo que es algo que varía entre municipios. En Cambrils, en la promoción en la que participé, no he tenido ninguna preferencia por el hecho de ser mujer. Hice la oposición en igualdad con el compañero que se presentó, algo que siempre he defendido. A la hora de acceder es diferente, ha habido modificaciones y se ha implantado la cuota”.

Sigue Lopez: “Siempre he apoyado la igualdad, por encima de las cuotas. En igualdad se consiguen las cosas, y creo que mi caso lo prueba. Hay que ver por qué se presentan menos mujeres y cambiar en ese sentido, tener más mujeres referentes, que la sociedad vea que está siendo representada. Hay que mostrar a las mujeres jóvenes que es posible llegar”.

“El problema es, a menudo, una misma: no creer que se puede porque los referentes siempre han sido masculinos, a veces sufrimos el síndrome del impostor”, explica.

¿Qué cambios deberían producirse para que haya más mujeres en  cargos de responsabilidad como Raquel? La inspectora responde que “es un proceso de educación y normalización desde la base. En los colegios, cuando van las unidades de educación viaria, siempre es bueno que vaya alguna mujer. Así, los niños y niñas ven y normalizan la presencia de mujeres en la policía. Es algo en lo que ya se ha progresado, antes se sorprendían más al ver a una mujer policía, y ahora lo ven normal, pero todavía hay que trabajar para mostrar que es una profesión de hombres y mujeres en igualdad”.

López también lanza un mensaje de empoderamiento a las mujeres que quieren ser policías en concreto o, en general, alcanzar un puesto de responsabilidad: “Las animaría a que estudiaran mucho, se prepararan físicamente y lo intentaran. Si fallan, no pasa nada. Cada error es un aprendizaje. Entre la gente con la que he coincidido, el que ha tenido ganas y motivación, lo ha acabado consiguiendo. Las compañeras que he conocido a lo largo de mi vida son todas policías y algunas están ascendiendo. Quien lo quiere y se esfuerza, lo consigue”.